lundi 14 décembre 2015

Voyage, voyelle, voler, sur tout voler. 


C’est étrange, je suis une étrangère, elles me manquent  les choses qui sont loin, celles-la qu’étaient à moi un jour si lointain maintenant; depuis mon départ de quelque parte, mon chemin a devenu une invention de sons que je ne connaissais pas avant, et étrangement, une langue étrangère  m’a donné l’opportunité de savoir et  de voir que apprendre est toujours possible,  et que c’est si beau, que nous pouvons vouloir nous perdre  toujours à la recherche d’un certain équilibre, ou, autrement dit, d’une certaine façon  de voler, de voyager…ailleurs. La hospitalité de cette langue vais m’accompagner toujours, comme souvenir d’une langue philosophique par excellence, et je reviendrai, après, pour raconter des histoires sur cet paradis que demain sera hier….nuit.

dimanche 13 décembre 2015

Pulsar

La última noche soñaba con animales que se daban la vida y la muerte en las mas difíciles de las condiciones. Era el tiempo de la partida de las lunas y todas sus definiciones. El aire pulsaba. La luz pulsaba. Las venas de la gente pulsaban. El ruido pulsaba para desordenar todas las palabras y dejarlas irse con el viento. Domingo, dia de votaciones, y ayer, en la última noche, ellos, el pulso, ya eran resignación...estoy cansada del pulso que me miente.  


lundi 7 décembre 2015

La señora pintada en la pared. 


Ayer cerca de la media noche, una mujer entraba en mi casa con su traje de mujer de mundo y su cabello de loca, y  sin pedirme permiso pisaba mi piso recién lavado. Esta mujer usaba unos tacos gigantes que la hacían ver tan ridícula como los políticos que intentan convencerme.

Cuando la vi, no me asusté ni tampoco intenté sacarla a empujones, tampoco le invité algo de beber, ni mucho menos a pasar, pues era inútil ya que ella ya estaba sentada en mi cama y se sacudía  sin pudor. Yo continué mirándola y siguiendo sus movimientos cada vez con mas y mas atención antes de acercarme a la puerta para invitarla a salir con un gesto definitivo..así lo hizo...

Su forma de salir de mi casa me hizo reír mucho, era evidente que mi piso le incomodaba los pasos, y como mi puerta se había agrandado para que no fallara en su salida espectacular, su espanto era muy gracioso. Esta mañana arranqué de enfrente de mi puerta un afiche de su campaña electoral, ella esperaba que yo decorara mis paredes con su rostro...pero no tengo tan mal gusto en realidad, y no me gustan las personas que se auto invitan a pasar; mucho menos, si vengo de preparar mi casa para mis invitados.   

jeudi 3 décembre 2015

Esta mañana de invierno tuve que excusarme con el sol por no ser muy entusiasta, por no querer verlo temprano justo cuando él es más preciado, mas raro.  El hecho es que no pude levantarme, mi cuerpo me pesaba más que dos planetas juntos y la respiración no prometía mucho, respirar no estaba disponible para mí, mi respiración estaba ocupada pensando en el dolor y la angustia del pasado, que vienen de vez en cuando a preguntar cómo estoy. Finalmente la tierra giró y me lanzó fuera de casa, me tendió la mano al sol, y de nuevo, como todas las mañanas, me cantó la canción de la vida. Estoy fuera, con los zapatos puestos, ya tomé el baño, buenos días sol. 

Pan de chocolate y té después, seguí las líneas de la rutina que tanto aprecio, y caminé por la ciudad, esta ciudad tan bella, tan profunda, tan amada. Me sumergía más y más en mis meditaciones en marcha, cuando escuché un reggaeton, si eso, un reguetón, y el té que había tomado en la mañana se revolvió y me hizo acercarme al lugar de donde venía aquella música. 

Bueno, pues era la empresa de transportes de la ciudad hacienado una campaña de reconocimiento y acercamiento a los usuarios...no se cómo explicarlo, ya me había pasado antes eso de llegar a un lugar en medio de esta ciudad y entre croissant y thé, verme inundada de reguettón, si eso, regguetón... ¿por qué demonios reggguetttón, y no una cumbia de las que aun se improvisan en los pueblos lejanos y perdidos de Colombia? ¿Por qué no la canción francesa? 

Finalmente llegué a puerto, es decir, al bus que debo tomar todos los días para construir un futuro imaginario y pensé quejarme por el olvido de la cultura francesa (el reguueetón acaba con las líneas del rostro que se forman en estas gentes tan complejas, misteriosas) y el olvido de la cultura de los ritmos afro-caribeños, pero temí que el conductor me tomara a mal y decidiera no llevarme a escuchar los cursos sobre filosofía griega, "le bien-être chez Platon" ...en definitiva, mujeres, hay que defender el derecho fundamental al libre movimiento de caderas en la ciudad.